Cree una comunidad, forje su negocio

Cuando uno está lanzando una empresa incipiente, una de las primeras tareas es identificar a los clientes potenciales y aprender sobre sus necesidades.

Esto quizá parezca muy diferente de los objetivos que he descrito en columnas anteriores sobre definir el propósito más grande de su negocio y ayudar a hacer frente a algunos de los grandes problemas que nuestra sociedad enfrenta actualmente, pero, de hecho, están relacionados. Involucrarse en esfuerzos voluntarios quizá le ayude a encontrar clientes y hacer crecer un negocio con raíces profundas en la comunidad, lo cual pudiera ser integral para su éxito a largo plazo.

Cuando mis amigos y yo iniciamos Virgins Records a principios de los años 70, respaldamos a un centro de asesoría estudiantil en Londres cerca de nuestras oficinas centrales, el cual ofrecía orientación a jóvenes sobre todos los temas. Desde cómo manejar la depresión hasta cómo conseguir empleo. Esto quizá no haya conducido directamente a ventas de discos, pero nuestro trabajo ahí nos ayudó a mantenernos en contacto con las inquietudes de nuestro público y los problemas que enfrentaban en una época en que la cultura estaba cambiando muy rápidamente.

A lo largo de los años, las empresas en el Virgin Group han tomado parte en varios proyectos locales, aunque “local” ahora signifique cerca de nuestras oficinas, tiendas y otros locales en todo el mundo. La experiencia nos ha enseñado que durante nuestros días de Virgin Records, también podríamos haber buscado prestar parte de nuestro equipo, nuestro personal y otros recursos a programas musicales de escuelas locales y otros grupos comunitarios enfocados en la música.

¿Qué ideas se le ocurren para su negocio? ¿Hay grupos en su comunidad que necesiten apoyo, quizá en términos de consultoría o equipo? ¿Hay habilidades que pudiera ofrecerse a enseñar? ¿Cómo le gustaría a su equipo involucrarse? Unas cuantas horas al mes pueden marcar una gran diferencia en la vida de la gente y ayudar al desarrollo de su compañía.

Esto se ha visto en otras compañías diferentes a Virgin. Un ejemplo bien conocido es Ben & Jerry’s Homemade, una empresa de helados basada en South Burlington, Vermont, que en sus primero años invirtió mucho en sus relaciones, contratando a todos, desde productores de leche hasta artistas en la comunidad local. (De hecho, cuando la empresa empezó a cotizarse públicamente en 1984, los fundadores, Ben Cohen y Jerry Greenfield, ofrecieron a los habitantes de Vermont la prioridad de comprar acciones, para recompensarles por su apoyo inicial.) Erigiéndose con base en esas relaciones, la compañía defendió buenas causas que captaban su atención, promoviendo a organizaciones como Farm Aid para apoyar a granjas familiares; después de algunos años, Ben & Jerry’s empezó a donar 7,5% de sus utilidades anuales previas a impuestos a proyectos orientados a la comunidad.

Aunque la compañía se volvió parte de la compañía multinacional de productos de consumo Unilever en 2000, sigue conservando su conexión local, su misión y su reputación. Y en el mercado mundial y fieramente competitivo de hoy, esto hace a la marca Ben & Jerry’s destacar entre la multitud; un activo muy valioso.

Ver este proceso en acción puede ser una experiencia poderosa. En un viaje reciente a Sudáfrica, visité Virgin Active, nuestra empresa de clubes de salud, y recibí una actualización sobre algunas de sus actividades comunitarias locales. El equipo en nuestro club insignia en Soweto me asombra por su enfoque en ayudar a las personas a llevar vidas más sanas y más productivas. Trabajando con el gobierno, recientemente lanzaron un programa de desarrollo juvenil llamado Equipo del Futuro, que ayuda a los bachilleratos locales a incorporar de nuevo la actividad física en los planes de estudio, ya que muchas escuelas en Sudáfrica no tienen instalaciones deportivas adecuadas y muchos estudiantes no están activos.

Virgin Active realizó el programa piloto en la Escuela Secundaria Lavender Hill, la cual está en el centro de una de las áreas más pobres de Ciudad del Cabo, y donde, contra todas las probabilidades, el director de la escuela, Faseeg Manie, ha creado un ambiente de enseñanza mejor y más seguro. Abrimos un nuevo gimnasio y lanzamos programas deportivos extraescolares y, en cuestión de días, un torrente constante de estudiantes se estaba uniendo a clases de ejercicio y usando el equipo.

Lavender Hill ha visto resultados grandiosos, y por ello planeamos enlazar a otros de nuestros clubes con otras escuelas. Nuestro personal de Active está capacitando a maestros y alumnos, y con el tiempo abrirán estas relaciones a los miembros, de manera que puedan ayudarnos a recaudar dinero para equipo escolar y voluntarios para orientar o entrenar a los estudiantes.

El propósito de esas actividades no es ganar dinero; aunque, como ha demostrado Ben & Jerry’s, en ocasiones éste puede ser un resultado indirecto. A través de las relaciones que se forjan realizando esa labor, su negocio se convertirá en el centro para la comunidad, apoyando e impulsando a la gente a su alrededor. Le ayudará a forjar una cultura más fuerte dentro de su compañía, mejores relaciones con sus clientes y su personal, y finalmente una empresa más exitosa.

Dé un vistazo alrededor. ¿Qué pueden hacer usted y su equipo?